Marisa Alguacil destaca que en estos cuatro años se ha incidido en aumentar la visibilidad del GDR Montes de Toledo, fortalecer vínculos con los promotores e impulsar el turismo

Marisa Alguacil es licenciada en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid. Sus primeros contactos con la política comenzaron en 2015 cuando se convirtió por primera vez en alcaldesa del municipio toledano de Ajofrín. Y fue en 2019 cuando por unanimidad, fue elegida presidenta del Grupo de Desarrollo Rural Montes de Toledo.  Tras este período, hemos charlado con ella para hacer balance de su paso por el grupo ahora que el relevo con un nuevo candidato se acerca.

¿Cuáles considera que han sido los logros más notables durante estos años en términos de desarrollo y crecimiento de la comarca?

Lo más significativo ha sido el trabajo y participación de los diferentes agentes de la comarca para conocer el camino a seguir. Analizando la situación y demandas de los promotores, entidades y administraciones ubicadas en nuestra comarca se ha elaborado la Estrategia de Desarrollo Local que marcará las actuaciones que se desarrollarán en el periodo 2023-2027. En algunos de estos objetivos ya se han puesto los cimientos de proyectos para hacerlos realidad.

¿Cuáles son los desafíos más significativos que ha enfrentado el grupo en estos años?

Cuando comenzaba en el 2019 irrumpió el COVID-19 e influyó notablemente en el funcionamiento del grupo. Nuestras juntas directivas comenzaron a ser on-line con los problemas existentes en el nivel de adaptación que aún hoy en día sigue siendo necesario. Durante ese tiempo decidimos poner en marcha un curso de formación on-line para los promotores de la comarca y ayudarles en esta difícil tesitura. El curso era sobre gestión empresarial: resiliencia, productividad y marketing digital. Otro hito fue la elaboración de los criterios de baremación para la concesión de subvenciones teniendo en cuenta aspectos de sostenibilidad y ruralidad. Y otro reto era el funcionamiento del equipo humano y profesional que durante la crisis del 2011 sufrió una merma y que durante este mandato hemos reforzado constantemente con más personal a través de otras subvenciones de la administración pública. Muchos de mis esfuerzos han ido encaminados a mejorar la convivencia del personal. El contacto más directo con los promotores que reciben subvenciones y la difusión mayor del grupo, así como el conocimiento de nuestra tierra potenciando el turismo. 

¿Cuál es su visión para la comarca de los Montes de Toledo en los próximos años?

Claramente el desarrollo de empresas en nuestra comarca que generen empleo y la atracción de turismo a la zona. Hemos trabajado en estas dos áreas principalmente. De hecho, hemos conseguido 2 millones de euros para el desarrollo de un Plan de Sostenibilidad Turística para potenciar nuestra comarca. Además, para dar a conocer nuestro patrimonio natural y cultural hemos solicitado la posibilidad de constituirnos como Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Queremos ser un territorio que armonice la conservación de la biodiversidad, el patrimonio cultural y el desarrollo económico y social a través de la relación de las personas con la naturaleza.

Durante su liderazgo, ¿cómo ha trabajado para fortalecer la colaboración entre diferentes actores, como organizaciones locales, gobiernos municipales, el sector privado y la comunidad en general?

Es lo más complicado, pero la metodología Leader significa eso, el trabajo en red y es lo que enriquece a cada comarca y lo que da singularidad a cada territorio. Pero este espíritu concuerda con mi personalidad. Trabajar en red o en equipo es la principal fortaleza de una comarca. La colaboración es permanente y la elaboración de la estrategia ha impulsado esta red de contactos que es necesaria mantener viva. Durante estos años se han realizado reuniones grupales de organizaciones locales, se ha trabajado el intercambio de experiencias y se ha visitado personalmente a los promotores para conocer de primera mano sus problemas y sus buenas prácticas para crear desarrollo en pueblos pequeños y a veces no tan pequeños.

¿Qué estrategias se han implementado para abordar el problema de la despoblación?

En esta área el gobierno regional ha trabajado en una estrategia que favorece a los pueblos que tienen menos población o que sufren la despoblación más acentuada incentivando la implantación de habitantes y empresas en esos pueblos. Esta normativa está implementada también en nuestros criterios de baremación para la adjudicación de subvenciones. De hecho, nuestro grupo ya aplicaba criterios de despoblación en nuestros baremos desde tiempo antes de que se aprobase la Ley de Despoblación y obligase a su implantación en todas las líneas de ayuda regionales. Aun así, nos parece una herramienta muy buena, pero se verán los resultados a medio y largo plazo. También la implantación por parte de la JCCM de conexiones de internet rápida en pueblos que no tenían ese acceso permite el teletrabajo, acentuado durante la pandemia y la atracción de población hacia zonas donde se vive con mayor calidad que en las ciudades. Para nosotros es muy importante revertir el éxodo migratorio de las ciudades hacia los pueblos y eso dependerá de lo que nosotros podamos ofrecer en nuestros municipios: calidad de vida con las mismas comodidades que en la ciudad. 

¿Cómo se ha involucrado a la comunidad local en la toma de decisiones y en la planificación de proyectos?

En este aspecto tenemos que trabajar más, aunque la participación de todos los sectores es difícil y requiere muchas medidas de motivación constante para la participación. En la junta directiva del grupo están representados del sector privado asociaciones que representan a diferentes colectivos: jóvenes, mujeres, empresarios, personas con discapacidad, agricultores y ganaderos, cooperativas de aceite… Por otra parte, la realización de otros proyectos nos permite enriquecernos con otras aportaciones diferentes de las personas que conviven en nuestra comarca. Por ejemplo, con las pequeñas acciones de promoción de nuestros productos gastronómicos como la cata de queso en Madrid. O el proyecto de Mujer Rural y Empleo, proyecto que buscaba mejorar la empleabilidad de las mujeres desempleadas de nuestra comarca.

¿Qué ha aprendido durante este período que podría ser de utilidad para su sucesor/a?

La visita personal y conocer las caras de las personas que invierten en nuestra comarca es una de las mejores experiencias que me llevo.


¿Qué balance hace del trabajo realizado en el grupo durante su tiempo como presidenta?

He intentado reforzar el equipo técnico del grupo, pero no he logrado mejorar la eficiencia de resolución de expedientes y algunos proyectos comarcales se quedan a mitad de camino como el plan de sostenibilidad turística o el proyecto de Reserva de la Biosfera. Otros proyectos en los que se ha estado trabajando son una red de miradores puestas de sol, la implantación de una red de pantallas digitales con la información turística del municipio y de la comarca Montes de Toledo, seguir promocionando otros productos con catas de degustación, la instalación de un marco ODS en Villarejo de Montalbán, remodelación de una página web más usable y realización de material audiovisual. 

Para concluir, ¿qué mensaje le gustaría transmitir a la comunidad local y a quienes liderarán el Grupo de Desarrollo Rural en el futuro en términos de continuar el camino hacia un desarrollo exitoso y sostenible?

El Grupo se encuentra en un momento crucial para continuar con proyectos que darán una proyección exterior muy importante a nuestra comarca, teniendo en cuenta nuestro patrimonio natural y cultural. Se han puesto los cimientos a través de subvenciones para continuar por el futuro de la transición verde y digital al que se dirige nuestro país y Europa.