Aprovechar la oportunidad, recuperar la confianza y preparar a los Grupos de Acción Local para diseñar y gestionar proyectos transformadores, trabajando con los sectores de cada territorio, conclusiones de la jornada “NEXT 2030: escenario de oportunidad para los GAL”.

La Asociación para el Desarrollo del Campo de Calatrava (Ciudad Real) organizó este jueves las Jornadas de reflexión colaborativa: “NEXT 2030”, donde se debatió con Grupos de Acción Local y expertos en desarrollo rural de toda España sobre cómo dar valor al territorio y cómo desarrollar proyectos emprendedores a corto, medio y largo plazo. Más de un centenar de personas participaron en las mismas.

La sesión comenzaba con la bienvenida de Gema García Ríos, presidenta de la Asociación para el Desarrollo del Campo de Calatrava; José Juan Fernández Zarco, director general de Desarrollo Rural de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha; y Carmen Torralba, presidenta de la Comisión de Despoblación y Reto Demográfico del Senado.

La anfitriona de las jornadas, Gema García, ha puesto de manifiesto la necesidad de aprovechar la situación y el cambio de escenario en el ámbito rural tras la pandemia, elaborando un nuevo modelo transformador donde los proyectos surjan de la propia comarca de “abajo a arriba”. “Desde lo rural tenemos mucho que decir, pero también hay mucho que decidir”, insistió.

Por su parte, el Director General hizo hincapié en que la “participación” es lo que hace fuerte a los grupos de desarrollo, es decir, que toda la sociedad se implique y defina qué se quiere hacer por hacer más grande a su territorio, poniendo de ejemplo la comarca del Campo de Calatrava, donde resaltó “la colaboración entre la asociación y la población” como uno de sus puntos fuertes.

La senadora Carmen Torralba ha señalado que es el momento de generar oportunidades, a través de herramientas como los Fondos de Recuperación Europeos “Next 20-30” y la recién aprobada Ley de Despoblación de Castilla-La Mancha, para ser capaces de ofrecer una vida digna en el medio rural, con entornos atractivos y dinámicos, especialmente hacia los jóvenes y las mujeres, principales colectivos para fijar población.

El desarrollo rural ante un nuevo escenario

En la primera sesión de debate, moderada por Carlos Corella, gerente de la AD Campo de Calatrava, se habló sobre qué representan los grupos de desarrollo rural (GDR), las necesidades y expectativas que tienen y cuál debe ser su misión futura.

Los ponentes José Luis Peralta, gerente de la Red Castellano-Manchega de Desarrollo Rural (RECAMDER); María Jesús Torres García, gerente del Grupo de Acción Local Sur de Alicante; y Vicente Pinilla, director de la Cátedra DPZ sobre Despoblación y Creatividad de la Universidad de Zaragoza, coincidieron en que “existe demasiada burocracia” y, como consecuencia, cada vez es más complicado llevar a cabo un proyecto, lo que hace que en muchos casos exista una falta de emprendimiento en determinados territorios.

“Si no somos capaces de aceptar la autocritica será difícil que los grupos mejoremos. Tenemos que dejar de ser meras ventanillas de tramitación de subvenciones y convertirnos en el nexo estratégico entre las administraciones y la población para articular el capital social”, resaltaba Carlos Corella.

Proyectos transformadores para el territorio

La segunda sesión de debate abordó el tema “Identificación y priorización de proyectos transformadores para el territorio. ¿Por qué es importante? ¿Cómo hacerlo?”, moderada por Joseba Egia, experto en Innovación y Gestión Avanzada, donde se conocieron varios casos de éxito, como el expuesto por Tania Solans, alcaldesa del pueblo oscense de Esplús; por Guillem Piris, del proyecto Hépic Hub del Valle de Arán, y por el bolañego, José Antonio Aranda, que dio a conocer el Campus Calatrava. 

Partía Joseba Egia de que se trata de pensar en “proyectos diferenciadores desde las fortalezas que tenemos, tangibles o intangibles, de la ilusión y el orgullo rural o de identificación al territorio”. 

Interesante el caso de Esplús, en Huesca, una pequeña población de 540 habitantes en 2017 -y actualmente ronda los 650-, afectada por la despoblación, que creó una bolsa de vivienda, y logró poner a la venta 25 y otras 15 en alquiler, revirtiendo la situación, y logrando que tanto el Colegio como la Escuela Infantil estuvieran completos, unido a la prestación de servicios como ludoteca, taxis, peluquería, farmacia, fisioterapia y podólogo, Biblioteca y Centro Social, e incluso organizar un Campeonato de España de Autocross. “Todo ello, hizo que fuera apetecible vivir aquí, hasta el punto de que nos sentimos orgullosos de pertenecer a nuestro pueblo”, señaló su alcaldesa.

Guillem Piris abundó “en la innovación y la diversificación, así como la cohesión territorial y la protección del medio ambiente para retener y captar el talento, junto al trabajo en red, con una clara visión de crecer y expandirnos en el territorio”.

Aranda explicó que Campus Calatrava es un espacio que estamos creando con la Asociación Campo de Calatrava, que incluye un Aula formativa y una segunda zona para demostraciones y casos prácticos. La idea es que se pueda impartir enseñanza presencial, semipresencial y digital, partiendo de la base de “formar y acompañar”. En suma, “un proyecto muy ilusionante, novedoso y diferenciador de apoyo al emprendimiento y a los emprendedores”.

El promotor del Campus Calatrava, Aranda, de “Ciudad sin cables”, expuso su caso donde están apoyando el talento para que se quede en la comarca del Campo de Calatrava. Destacó que “Castilla-La Mancha se encuentra a nivel nacional en el puesto 14 en competitividad, muy abajo, y necesita un empuje. Al igual que la comarca Calatrava y, nada mejor para ello, que la formación y la digitalización como nexo de unión y de impulso”.

 

¿Qué necesitan las ADR para abordar esta nueva etapa?

La tercera sesión versó del tema “Preparándonos para la implementación de los proyectos transformadores. ¿Qué necesitamos las ADR para abordar esta nueva etapa?”, en la que hubo tres presentaciones sobre casos críticos, moderados por Alex Moga Vidal, asesor de Estrategia del Valle de Arán, quien subrayó que estamos en uno de los grandes desafíos por la pandemia y necesitamos ejemplos de liderazgo, como los de esta mesa.

De la importancia de implantar un modelo de gobernanza habló Antxon Gallego, de la empresa Ibatuz, expertos en Gobierno Abierto, Participación, Nuevas Tecnologías y Transparencia. Dejó claro que estamos ante un nuevo escenario, con crisis económica y social debido a la Covid-19, lo que trae consigo nuevos retos sociales, económicos y medioambientales. “Hay que gobernar con estrategias, con una gestión más en horizontal y un formato colaborativo, los modos habituales de antes ya no sirven, ahora se exige un nuevo modo de innovación, trabajando la transformación digital hacia un modelo de transición ecológica”, reiteraba.

Para ello, expuso que hay que trabajar en 4 pilares: territorios abiertos, participativos, igualitarios y comprometidos con el desarrollo sostenible, o sea “una nueva gobernanza para una nueva realidad”. “Más que nunca necesitamos la agenda 2030 y prepararnos para el futuro incierto” dijo para lo que dio 20 claves imprescindibles para reinventarnos y reposicionarnos, entre otras recomendaciones”, insistió.

Paul Gurmendi, de Tech for Society, Guipúzcoa, habló de digitalización e inteligencia de datos. Explicó qué es la transformación digital, dando ejemplos atractivos y otros de realidad aumentada. Afirmó que “hay que multiplicar servicios y retroalimentarlos”, esbozando al final otra revolución que está en camino como es la de la movilidad. 

Por su parte, Beatriz García Ricondo, de Crearte Coaching se centró en “Resiliencia y nuevos estilos de liderazgo”. Esta coach y formadora, experta en “mindfulness” e inteligencia emocional, programación neurolingüística y organizacional, partió de la base de que “vivimos en un mundo donde lo único que no cambia es que todo cambia a cada momento, el concepto VUCA (en inglés), volátil, incierto, complejo y ambiguo”.

Ricondo abordó la resiliencia en los equipos y la claves para desarrollar en el entorno laboral, porque muchos equipos “no están creando su realidad sino viviendo en el pasado”, animando a lo que ella calificó como “afilar la sierra: a renovarse y reciclarse”.

La clausura de la Jornada corrió a cargo de María Jesús Villaverde, vicepresidenta de Desarrollo Rural, Turismo y Sostenibilidad de la Diputación de Ciudad Real; Jesús Ortega, presidente de la Red Castellano-Manchega de Desarrollo Rural (RECAMDER) y Gema García, presidenta de la Asociación organizadora.

Villaverde felicitó al Campo de Calatrava por estas interesantes jornadas dejando claro que “en la Diputación seguiremos apoyando a los GAL, por su gran gestión de los programas Leader, y por eso estos grupos de desarrollo rural deben estar presentes en los fondos de Next Generation de la Unión Europea, oportunidad única para salir más fuertes de la pandemia, transformar nuestra economía y crear oportunidades y trabajos. Son unos fondos donde los GAL han de ser tenidos en cuenta, porque estos Grupos son puerta de entrada para fijación de población y empleo, y emprendimiento”.

Jesús Ortega felicitó al presidente de Castilla-La Mancha por la nueva “Ley de Medidas económicas, sociales y tributarias frente a la Despoblación y para el Desarrollo Rural” en la región, que se publicó el pasado 12 de mayo en el DOCM, pionera en nuestro país, y con la que el Ejecutivo autonómico marca el camino en la lucha para frenar la pérdida demográfica. Calificó la ley de valiente y necesaria, por tener en cuenta al mundo rural y primar el consenso, confiando en que el Gobierno nacional tome nota.

Gema García dijo, a modo de conclusión, terminar “emocionados en el Campo de Calatrava por el resultado de las Jornadas, porque aquí se ha puesto de manifiesto que el medio rural no está solo y que los Grupos de Desarrollo Rural luchamos contra la despoblación, donde tenemos mucho que aportar”. Como reflexiones, puso de manifestó “la oportunidad, es el momento de trabajar en lo rural y también para crear una Europa más verde, más digital y más resiliente. Así como la relevancia de partir de un modelo más participativo y colaborativo, de éxito”. 

García Ríos invitó a “soñar, apoyándonos en nuestras fortalezas, visibles o invisibles, relacionándonos con nuestro territorio, con una gestión abierta, trasparente y trabajando tomando decisiones desde los datos, apoyándonos en la ilusión y la colaboración como red”.